25 Nov Xenia Fuster sobre la crisis habitacional en Chile: «Nosotros no necesitamos construir más viviendas, necesitamos tener viviendas asequibles para las personas»
14 de noviembre/ TVU/ La investigadora asociada de CEDEUS Xenia Fuster, abordó la crisis de vivienda que golpea a nuestro país en entrevista con el canal TVU de Concepción.
El pasado 12 de noviembre un voraz incendio arrasó con más de 50 hogares en la toma Dignidad, en la comuna de La Florida. Según las primeras indagatorias, un desperfecto eléctrico originó las llamas, algo que es bastante habitual en este tipo de construcciones improvisadas. A raíz de esta situación, la investigadora asociada al proyecto Ciudades Justas de CEDEUS, Xenia Fuster abordó el fenómeno de proliferación de las tomas de terreno y la crisis de vivienda en Chile.
En una entrevista con el canal TVU de Concepción, Fuster explicó que el principal problema de estos campamentos “es la carencia y que para poder acceder a otros servicios, como la electricidad, es bien peligroso. En estos sitios no es que no se sepa quién es el dueño; en general, se sabe. Cuando caminamos por el centro de Concepción, a menudo llaman la atención estos cuadrados o medias cuadras abandonadas, que podrían ser potencialmente una ocupación de terreno. En general, las tienen inutilizadas porque sus propietarios esperan a que el precio del suelo aumente y generar desarrollo inmobiliario”.
“Si tuviésemos más planificación y se pensaran un poco mejor las ciudades, le daríamos otra utilidad a estos espacios. Tenemos un gran problema sobre la crisis de la vivienda: muchas personas no tienen lugares dignos donde vivir. Pero esto no se trata solo de vivir en una casa, sino que dónde está ubicada, que no esté en un lugar periférico o lejos de las ciudades, etcétera”, plantea la investigadora asociada de CEDEUS.
“Las ciudades expulsan a la población más desfavorecida”
Xenia Fuster señala que “conforme más crecen las ciudades, se vuelven más atractivas, llenándose de servicios y oportunidades laborales, lo que es atractivo desde un punto de vista económico. Como tenemos muchos sistemas que son desiguales, como la salud y la educación, las personas quieren estar cerca de los buenos colegios, los centros de salud de calidad o donde hayan más profesionales especialistas. Entonces, la tendencia es querer vivir en los centros urbanos, pero hoy las ciudades y la política habitacional funcionan bajo una lógica que expulsa a las poblaciones más desfavorecidas hacia las periferias“.
La también directora del Laboratorio Urbano de la Universidad de Concepción comentó que “no es que los lugares no den abasto. Justo antes de venir estaba mirando lo que pasó en La Florida e ingresé a las plataforma de Ecoliving y Airbnb, donde se puede arrendar departamentos por una noche, dos noches, arriendos turísticos. Y me di cuenta la cantidad de oferta que hay en La Florida, lo que quiere decir que hay inmuebles completos que están disponibles para el arriendo por una o dos noches. Entonces, espacios para vivir hay, pero la pregunta es ¿para quiénes?”.
“En general, estos espacios están cada vez más reducidos a un porcentaje limitado de la población que puede acceder a arriendos cada vez más altos. En Concepción estamos teniendo arriendos muy similares a comunas de la Región Metropolitana como Ñuñoa o Providencia, que cuentan con otro tipo de amenidades urbanas que nosotros no tenemos. Entonces, eso significa que estamos restringiendo el mercado de arriendo y el acceso a la vivienda en propiedad, que es uno de los grandes problemas que hoy tenemos”, agrega Fuster.
¿Cómo enfrentar la crisis de vivienda en Chile?
La investigadora explica que, a la hora de buscar una vivienda en Concepción, “las oportunidades son cada vez más restringidas. Lo que está pasando es que los estudiantes son un tipo de población con características de hogar muy específicas. Sin embargo, en el centro de la ciudad, estamos edificando una ciudad pensando en este grupo que necesitan espacios muy reducidos. ¿Y qué pasa con las familias? porque ellas siguen viviendo en Concepción. Entonces, los espacios un poco más amplios y cómodos se van restringiendo en precio y en cantidad”.
En términos de solución, la crisis habitacional, según Fuster, “no tiene que ver con construir más, porque con una búsqueda rápida uno se da cuenta que construcciones hay, viviendas hay. Nosotros no necesitamos construir más viviendas, necesitamos tener viviendas asequibles, viviendas que las personas puedan pagar, ya sea en arriendo o en propiedad”.
“Yo diría que el gran problema que tenemos en Chile es el de la asequibilidad. Tenemos políticas habitacionales destinadas a esta población, que necesita más apoyo, pero están pensadas desde una lógica solo de la propiedad, restringiendo mucho las soluciones que podemos tener y abriéndose muy poco a otro tipo de soluciones, que no sean el acceso a propiedad. Es un problema que algo tan vital como la vivienda sea un negocio. Mientras sigamos considerando la vivienda como una mercancía, esta crisis seguirá agudizándose”.
Ve la entrevista completa en este enlace.