¿Seguiremos investigando como lo hemos hecho hasta ahora?


Durante la jornada de la mañana, las exposiciones se concentraron en reflexionar sobre los vínculos entre la ciencia, las políticas  y lo público, para luego revisar experiencias nacionales e internacionales que buscan llevar la información científica a los tomadores de decisiones.

La Doctora en Ecología, investigadora del IEB y Presidenta de la Sociedad de Ecología de Chile, Olga Barbosa, reconoció que el parlamento tiene un lenguaje diferente al que están acostumbrados los científicos y que es necesario conocer los códigos del Congreso para que la información científica llegue de manera oportuna y eficiente.

En tal sentido Barbosa también abordó la importancia de que la ciencia dialogue con otros espacios, con el mundo de las organizaciones sociales, con las empresas y también con el mundo político para que las investigaciones tengan un impacto real. No es posible a su juicio, solo producir paper e impactar en la comunidad científica, sin establecer contacto con el resto de la sociedad.

El periodista, magister en periodismo científico y Asesor Técnico Parlamentario de la Biblioteca del Congreso Nacional, Raimundo Roberts,  habló sobre el trabajo que se hace en la comunidad europea a  la hora de construir documentos de temáticas científico-tecnológicas para asesoría parlamentaria.  También abordó algunas experiencias en Chile, como la construcción de un documento en conjunto entre la Iniciativa Científica Milenio y la Biblioteca del Congreso (ver aquí)

Juan Antonio Carrasco, académico UDEC e Investigador Principal de CEDEUS, e impulsor de esta iniciativa señaló  que “la riqueza de la ciencia no puede quedarse solo en publicaciones y círculos reducidos científicos. Es muy importante que nuestros hallazgos y perspectivas científicas se den a conocer a toda la sociedad y especialmente a quienes tienen la responsabilidad de hacer las leyes, por eso es importante llevar adelante estas actividades, para aprender y saber qué lenguajes debemos manejar para impactar en el mundo público”.

Esta actividad fue posible gracias al apoyo de la Facultad de Ingeniería y la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía de la Universidad de Concepción.



¿Seguiremos investigando como lo hemos hecho hasta ahora?


Durante la jornada de la mañana, las exposiciones se concentraron en reflexionar sobre los vínculos entre la ciencia, las políticas  y lo público, para luego revisar experiencias nacionales e internacionales que buscan llevar la información científica a los tomadores de decisiones.

La Doctora en Ecología, investigadora del IEB y Presidenta de la Sociedad de Ecología de Chile, Olga Barbosa, reconoció que el parlamento tiene un lenguaje diferente al que están acostumbrados los científicos y que es necesario conocer los códigos del Congreso para que la información científica llegue de manera oportuna y eficiente.

En tal sentido Barbosa también abordó la importancia de que la ciencia dialogue con otros espacios, con el mundo de las organizaciones sociales, con las empresas y también con el mundo político para que las investigaciones tengan un impacto real. No es posible a su juicio, solo producir paper e impactar en la comunidad científica, sin establecer contacto con el resto de la sociedad.

El periodista, magister en periodismo científico y Asesor Técnico Parlamentario de la Biblioteca del Congreso Nacional, Raimundo Roberts,  habló sobre el trabajo que se hace en la comunidad europea a  la hora de construir documentos de temáticas científico-tecnológicas para asesoría parlamentaria.  También abordó algunas experiencias en Chile, como la construcción de un documento en conjunto entre la Iniciativa Científica Milenio y la Biblioteca del Congreso (ver aquí)

Juan Antonio Carrasco, académico UDEC e Investigador Principal de CEDEUS, e impulsor de esta iniciativa señaló  que “la riqueza de la ciencia no puede quedarse solo en publicaciones y círculos reducidos científicos. Es muy importante que nuestros hallazgos y perspectivas científicas se den a conocer a toda la sociedad y especialmente a quienes tienen la responsabilidad de hacer las leyes, por eso es importante llevar adelante estas actividades, para aprender y saber qué lenguajes debemos manejar para impactar en el mundo público”.

Esta actividad fue posible gracias al apoyo de la Facultad de Ingeniería y la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía de la Universidad de Concepción.